OFP | Casa Museo

LUGARES DE MEMORIA

Colegio Camilo Torres

Este lugar es el primer plantel educativo de carácter público que existió en Barrancabermeja. En este colegio se han formado gran parte de las defensoras de Derechos Humanos de Barrancabermeja. Camilo Torres fue un sacerdote católico colombiano, sociólogo, académico, político revolucionario abanderado de causas sociales y asesor de políticas públicas. Fue uno de los primeros sociólogos profesionales colombianos. Junto con el reputado sociólogo Orlando Fals Borda creó la carrera y la Facultad de Sociología (primera en Latinoamérica) en la Universidad Nacional. Organizó el Primer Congreso Colombiano de Sociología y participó de manera protagónica en la creación de las Juntas de Acción Comunal. Pionero de los estudios sociales urbanos en el país, fue uno de los constructores de redes académicas e institucionales que posicionaron la sociología colombiana a nivel internacional. Fundó y lideró el Frente Unido del Pueblo, uno de los movimientos políticos que ha aglutinado al mayor número de sectores sociales en Colombia aunque su duración fue efímera. Fue pionero de la Teología de la Liberación en Colombia y miembro del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN). En el año 1965 presidió manifestaciones y reuniones públicas en Cúcuta, San Gil, Barrancabermeja, Cali, Palmira, Buga, Ocaña, Bucaramanga, Medellín, Ibagué, Barranquilla y otras ciudades más. Falleció el 15 de febrero de 1966 en combate en Patiocemento, San Vicente de Chucurí, Santander

PBRO. Eduardo Díaz Ardila

Llegó a Barrancabermeja en octubre de 1970 cuando tenía 28 años y fue nombrado Vicario de la parroquia Catedral La Inmaculada. Fue un sacerdote comprometido con lo social y lo político. En el año de 2011 fue nombrado Vicario General de la Diócesis de Barrancabermeja y posteriormente, hizo parte de la Junta Directiva de la Corporación Desarrollo y Paz, que impulsa el Programa de Desarrollo y Paz del Magdalena Medio. Durante su permanencia en la parroquia El Señor de los Milagros, junto con el P. Floresmiro López, fundaron el Colegio Camilo Torres y realizaron una intensa labor pastoral de evangelización y organización de las comunidades más pobres del nororiente de la ciudad, dando lugar a la formación de los Clubes de Amas de Casa, que más tarde se convirtió en la Organización Femenina Popular. Participó activamente en movimientos sociales que buscaban un mejor bienestar para la población de Barrancabermeja, brindó apoyo a los invasores de tierras que luego conformaron el barrio 1º de Mayo; igualmente colaboró activamente con el paro cívico de 1975, reivindicando el servicio del agua. Por su labor social recibió amenazas y acusaciones que lo llevaron a exiliarse entre 1987-1996 en Canadá. Falleció en Bucaramanga el 24 de abril de 2018 .

PBRO. Floresmiro López Jiménez

Llegó a la ciudad de Barrancabermeja en 1969, en donde se mantuvo por nueve años como Párroco de la Iglesia del Señor de los Milagros. De su labor en el puerto petrolero, llegó a fundar y dirigir el Secretariado de Pastoral Social. El interés por la educación lo llevó a fundar el reconocido colegio Camilo Torres, del que no sólo fue creador sino docente y director hasta 1978. Luego de ser nombrado párroco para San Vicente de Chucurí en 1982, ideó y concretó una obra social de grandes proporciones para el municipio, cuyo eje era el Instituto Cristiano de Promoción Campesina ICPROC idea que se materializó con el apoyo conceptual y motivacional del Monseñor Nel Beltrán quienes se constituyeron en los fundadores de la institución. Dedicó treinta años al servicio sacerdotal con gran compromiso social en el Magdalena Medio y falleció el 6 de diciembre de 2002 a los 63 años.

PBRO. Juan José Cárdena Ortíz

Fue párroco de la Cuasi Parroquia San Francisco de Asís, del Corregimiento La Fortuna, del Distrito de Barrancabermeja. Prestó sus servicios como sacerdote durante 31 años y estaba adscrito a la Diócesis de Barrancabermeja, en donde resaltan su labor pastoral y comunitaria. Falleció el 16 de junio de 2022 víctima de un desastre natural.

Esperanza Amaris Miranda

Fue líderesa, defensora de Derechos Humanos, integrante de la Organización Femenina Popular. Asesinada por grupos paramilitares el 16 de octubre de 2003 a sus 40 años en el barrio Versalles de Barrancabermeja. Esperanza recibió amenazas directas y órdenes de abandonar la ciudad antes de los hechos. A pesar de ello, siempre mantuvo su postura de defensa de la vida y el territorio, en coherencia con los principios de civilidad y autonomía que orientan la acción de la Organización Femenina Popular. “Siempre se destacó por participar activamente, aprender rápido y compartir sus aprendizajes a otras compañeras. Durante su proceso de empoderamiento como sujeto social, asistía a las reuniones semanales programadas en la Casa de la Mujer del nororiente con el objetivo de planear y ejecutar actividades en pro de la defensa y construcción de los derechos de las mujeres, entre ellas las del programa de seguridad alimentaria, expresado en los comedores populares. Esperanza es recordada por sus compañeras por su sentido de responsabilidad, su alegría y picardía para hacer de la cocina un lugar de construcción de tejido contra la guerra” (https://vidassilenciadas.org/victimas/28692/). “Esperanza supo de inmediato que la iban a matar y se negó a ser partícipe silenciosa de su propia muerte. En cuanto pudo se tiró del carro, rodó y pudo ver que estaba en frente del colegio Camilo Torres. Los hombres se bajaron del carro y presintiendo la ayuda que venía, la fuerza que el nombre de esa mujer convocaba, la mataron allí mismo. Eran las ocho y treinta de la noche. Unos minutos después, las mujeres llegaron en la camioneta, solas, con nada más que sus cuerpos dispuestos a ser escudo. Esperanza rezumaba calor, pero ya no respiraba”. A los hombres los capturaron esa misma noche (…) Habían subestimado a una mujer convoca, y esta mujer, para su pesar, eran muchas”

Diofanol Sierra Vargas

Fue defensor de Derechos Humanos y promotor de cultura, instructor de danzas y músicas tradicionales de la Organización Femenina Popular. Asesinado el 8 de abril de 2002 en el barrio La Esperanza de Barrancabermeja, a sus 30 años por grupos paramilitares. “Diofanol estaba cargado de fuerza, su mirada profunda, su sonrisa dispuesta y su cuerpo que marcaba el ritmo de la vitalidad arrastraban tras de sí a montones de niños y jóvenes que veían en la danza y en la música una opción para combatir el miedo (…) En lo más profundo de la educación y principios que le habían dado sus padres primaba la defensa de la vida. El trabajo que hacía en la OFP era una muestra de ello: estamos hablando de un hombre que bailaba para dar alegría, que formaba para reparar cuerpos de víctimas del destierro, sobrevivientes de masacres y asesinatos selectivos” (…) “Los jóvenes del grupo de danzas de la OFP gritaron ‘¡que viva la vida!’ para expulsar a la muerte: a Diofanol no lo enterraron, sino que lo sembraron” .
Yamile Agudelo Peñaloz
Fue defensor de Derechos Humanos y promotor de cultura, instructor de danzas y músicas tradicionales de la Organización Femenina Popular. Asesinado el 8 de abril de 2002 en el barrio La Esperanza de Barrancabermeja, a sus 30 años por grupos paramilitares. “Diofanol estaba cargado de fuerza, su mirada profunda, su sonrisa dispuesta y su cuerpo que marcaba el ritmo de la vitalidad arrastraban tras de sí a montones de niños y jóvenes que veían en la danza y en la música una opción para combatir el miedo (…) En lo más profundo de la educación y principios que le habían dado sus padres primaba la defensa de la vida. El trabajo que hacía en la OFP era una muestra de ello: estamos hablando de un hombre que bailaba para dar alegría, que formaba para reparar cuerpos de víctimas del destierro, sobrevivientes de masacres y asesinatos selectivos” (…) “Los jóvenes del grupo de danzas de la OFP gritaron ‘¡que viva la vida!’ para expulsar a la muerte: a Diofanol no lo enterraron, sino que lo sembraron” .

José Javier Jaramillo Díaz

Era un joven de 17 años que hacía parte del grupo de tamboras de la Organización Femenina Popular, víctima de la masacre del 16 de mayo de 1998 en Barrancabermeja. “Era alto, simpático, blanco, ingenuo y sin embargo un peladito (muchachito) con cuerpo de hombre. Nunca le creían que tuviera 17 años; por la estatura, además ya hablaba gruesito... Le gustaba bailar mucho. Competía en los bazares y danzaba con los otros pelados. Pero sobre todo tocaba tambora como “un maestro”. Sí, a esa edad ya le decían maestro. Es que él aprendió a tocar desde pequeñito. Y cuando enseñaba tenía muchos discípulos (…) Mi José lo único que quería era enseñar tambora, viajar, formar grupos (…) A mi pelado le faltaban por hacer muchas cosas (…) Yo creo que ahora él seguiría en la tambora viajando por pueblos y ciudades, si no lo hubieran matado. Y no sólo él (…) José tuvo un discípulo que tenía 6 años, buenísimo. Y cuando pasó todo aquello los papás lo sacaron (…) ¿Quién sabe qué hubiera sido también de él? (…) Y de los otros (…) Y de tantos…” (Relato de Margarita Díaz, Madre de José Javier) .

Blanca Cecilia Valero Durán

Fue lideresa social en Barrancabermeja, Secretaria del Comité Regional para la Defensa de los Derechos Humanos (CREDHOS). Fue asesinada el 29 de enero de 1992 cuando salía de las oficinas del Comité, ubicadas en el centro de Barrancabermeja por la Red Armada 07, por orden del Director de Inteligencia de la Armada Nacional, Coronel Rodrigo Alfonso Quiñónez Cárdenas . Este crimen de Estado se sumó al de cientos de hombres y mujeres que luchaban por la vida en Barrancabermeja y el Magdalena Medio.

Luisa Delia Piña López

Era una campesina nacida en San Vicente de Chucurí y fue lideresa social de Barrancabermeja. La comunidad la conocía como “La Tía”. Durante los años 70 y 80, estuvo en el fragor de las luchas de los paros cívicos y huelgas. Haciendo sancochos comunales y participando en las marchas. Atendió hasta el final de su vida su pequeño negocio en la Plaza de Mercado Torcoroma en Barrancabermeja. En una entrevista dijo: “Quiero, antes de morirme ver un final donde las mujeres sean triunfantes y levanten la bandera de la revolución de un pueblo”. Falleció el 13 de mayo del 2005 en su querida Barrancabermeja, dejando un gran legado político y de servicio a la comunidad, de ejemplo para las generaciones pasadas y venideras.

Evangelina Marín Rueda

Evangelina Marín fue licenciada en ciencias sociales del magisterio y defensora de los derechos humanos en la corporación CREDHOS, donde era reconocida por su liderazgo. Falleció el 1 de diciembre de 2020 a causa de afecciones de salud.

John Stevens Londoño Laguna

Era reconocido en el gremio periodístico como ‘London’. Hizo parte a lo largo de su vida de los canales Telepetróleo y Enlace TV y se destacó por su excelente trabajo como productor audiovisual en diferentes proyectos en la ciudad de Barrancabermeja. Falleció el 19 de junio de 2021 a causa de la enfermedad Covid-19.
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